La impugnación de paternidad es una acción judicial que busca dejar sin efecto una filiación que figura en el Registro Civil.
Procede cuando existe una paternidad establecida por presunción legal, reconocimiento o sentencia, pero surgen antecedentes que indican que el vínculo biológico no existe.
Esta acción se tramita ante un tribunal de familia y suele apoyarse en un examen de ADN realizado en el Servicio Médico Legal, organismo dependiente del Ministerio de Justicia.
El Código Civil regula esta materia en sus artículos N° 211 a 216. Allí se detallan los legitimados, los plazos y las reglas específicas según el tipo de filiación.
¿Quiénes pueden iniciar una impugnación de paternidad?
El derecho a impugnar cambia según si el hijo nació dentro o fuera del matrimonio. A continuación, se presentan los grupos habilitados para demandar y los plazos asociados.
Hijo nacido dentro del matrimonio
- El marido: puede impugnar dentro de 180 días si convivía con la madre al momento del nacimiento o dentro de un año si prueba que estaban separados de hecho. Si estaba ausente y vuelve después, se entiende que conoció al regresar, salvo ocultamiento.
- Herederos del marido o terceros interesados: cuando el marido muere sin conocer el nacimiento o antes de que venza su plazo. Deben usar el tiempo que a él le quedaba. No procede la acción si el hijo fue reconocido por el marido en testamento o escritura pública.
- Representante legal del niño incapaz: se habilita la acción dentro del año siguiente al nacimiento.
- El hijo: se autoriza para presentar la demanda durante el año que sigue a cumplir 18 años, momento en que adquiere plena capacidad legal.
Hijo nacido fuera del matrimonio
- El hijo: es capaz de impugnar dentro de los dos años desde que conoce el reconocimiento.
- Representante legal del niño incapaz: debe seguir las reglas que señala el artículo N° 214.
- Herederos del hijo: si el hijo fallece sin conocer el reconocimiento o antes de que se cumpla su plazo. Usan el mismo tiempo que le restaba.
- Terceros interesados: demandan dentro del año desde que adquieren un interés actual que les permita ejercer la acción.
¿Cómo se hace una impugnación de paternidad en Chile?
El proceso comienza con la presentación de la demanda ante el tribunal de familia. El escrito expone la filiación vigente, los hechos que justifican impugnarla y las pruebas que se solicitarán.
El tribunal cita a audiencia para revisar la admisibilidad y ordenar el examen de ADN. Las partes deben concurrir al Servicio Médico Legal o a un laboratorio privado autorizado por el Ministerio de Salud.
Si el demandado evita la toma de muestra sin justificación, su conducta se valora durante el juicio como un antecedente relevante. Luego, el tribunal celebra una audiencia de juicio para revisar los resultados, analizar los antecedentes y dictar sentencia. Si la demanda prospera, se ordena inscribir la resolución al margen de la partida de nacimiento.
Duración del proceso
El tiempo que toma el proceso no tiene un plazo fijo. Varía según la complejidad del caso, la carga de los tribunales y la disponibilidad para realizar el examen de ADN.
En muchos casos, el trámite se extiende entre seis meses hasta un año, siempre que la producción de prueba avance sin retrasos.
¿Cuándo se deben presentar juntas la impugnación y la reclamación?
El artículo N° 208 del Código Civil exige que, cuando una persona ya tiene una filiación inscrita y se quiere establecer otra distinta, ambas acciones se presenten en conjunto. Esto evita que un niño quede sin filiación durante el proceso.
Por eso, cuando se busca corregir una inscripción y reconocer al padre biológico, la impugnación y la reclamación deben avanzar en un mismo expediente. Para coordinar todos estos pasos, siempre ayuda trabajar con un abogado de familia que tenga experiencia en este tipo de causas.
¿Qué ocurre después de la sentencia?
Después de la sentencia, el tribunal ordena inscribir la resolución en el Registro Civil. Con esa anotación, la filiación anterior deja de producir efectos y, si corresponde, se incorpora la nueva.
Esto actualiza oficialmente la información del nacimiento y permite que las relaciones jurídicas posteriores —como alimentos, herencia o apellidos— se ajusten a la filiación que el tribunal declaró.
Relación con otros procesos de familia
A veces, la necesidad de impugnar surge junto con la intención de iniciar una demanda de paternidad, por lo que conviene planificar ambas acciones al inicio. Cuando existen obligaciones alimentarias involucradas, resulta útil contar con un abogado de pensión alimenticia.
¿Por qué conviene buscar apoyo especializado?
Si usted necesita orientación para presentar esta demanda, revisar los plazos y evaluar pruebas, le será útil contar con profesionales que conozcan la regulación aplicable y los criterios de los tribunales.
En nuestro estudio jurídico Abogaley encontrará a un abogado para impugnación de paternidad que le apoyará durante todo el proceso. Comuníquese con nosotros a la brevedad para comenzar.
